En consultoría, muchas veces escuchamos: “el sistema se quedó pequeño”.
Pero la realidad es que los ERPs no se quedan pequeños, sino que las empresas crecen y requieren nuevas capas de tecnología.
Cada día nos encontramos con situaciones típicas como las siguientes:
- Una empresa de distribución necesita WMS para controlar bodegas y trazabilidad.
- Una manufacturera requiere módulos avanzados de producción.
- Una empresa en expansión busca analítica avanzada para decisiones rápidas.
¿Te suena familiar?
Muchas veces, estas situaciones solo quedan en simples ilusiones porque no se aterrizan a necesidades reales de la organización.
A continuación, te presentamos algunas acciones consultivas para complementar tu ERP:
- Evalúa qué procesos no están siendo cubiertos por tu sistema actual.
- Busca integraciones certificadas (BI, aplicaciones móviles, e-commerce, chatbots), que tengan integraciones probadas con tu ERP (de lo contrario directa o indirectamente estarás asumiendo los costos de la integración).
- Define un roadmap tecnológico que acompañe tu crecimiento a 5–10 años.
- Asegúrate que las nuevas soluciones estén alineadas con tu ERP y no lo conviertan en una “colcha de retazos”.
El ERP es la base tecnológica de tu negocio, pero no el techo. Las empresas familiares que crecen entienden que la clave no es reemplazar, sino integrar y expandir estratégicamente su ecosistema digital.
Recuerda que el escenario real no es tener tecnología dispersa o simplemente tener un ERP, el objetivo es que toda la tecnología que utilices se integre entre sí para el crecimiento de tu negocio